Trekking por la Sierra Madrileña: Bola del Mundo

He perdido la cuenta de los días que hemos pasado confinados. Deben andar por los 60 y pico. Por fin, después de tanto tiempo y respetando las franjas horarias para hacer deporte, podría pisar la montaña. Por fin podría volver a hacer un trekking por la sierra madrileña, la sierra de mi comunidad.

La noche anterior me encontraba nervioso. Siempre tengo algo de nervios cuando voy a hacer alguna actividad que entrañe algo de riesgo, pero en este caso, los nervios venían por otro lado. ¿Cómo me encontraría la montaña? ¿Cómo me encontraría yo después de tanto tiempo sin poder realizar actividad física?

El despertador sonó a las 5 de la mañana, tardo una hora desde mi casa hasta la sierra y tenía 4 horas de actividad deportiva, por lo que no quería desperdiciar ni un solo minuto. En otras ocasiones hubiera llamado a algún amigo, pero esta vez, la primera, quería que fuera algo personal. La montaña y yo.

A las seis de la mañana aparqué en el parking de la Estación del Puerto de Navacerrada. Me sorprendió que sólo hubiera tres coches más, ya que suele estar lleno. Nada más bajarme de la furgoneta pude sentir otro tipo de aire, un aire diferente que no se respira en la ciudad, a pesar de separarlos apenas 60 kilómetros.

El trekking que hice es ida y vuelta, comienza en el Puerto de Navacerrada hasta Bola del Mundo (2.265 m). Es una ruta sencilla que en verano la hacen muchas familias con niños. En invierno y con nieve, ya es otra cosa. El total del recorrido son 7,50 kilómetros aproximadamente, con un desnivel positivo de 400 metros.

Comienza justo frente a las dos cafeterías que hay en el Puerto: «Venta Arias», en la que recomiendo tomar un café en su gran terraza y «Dos Castillas», en la que se come bastante bien. Ambas cafeterías alquilan también material de esquí y de Snow en temporada alta.

Nos dirigimos en dirección al telesilla, que se ve perfectamente desde donde hemos aparcado. Cruzamos una puerta metálica giratoria y seguimos el sendero perfectamente delimitado hasta Bola del Mundo. Es imposible perderse en este trayecto.

Casi el 100% del sendero que lleva hasta el vértice geodésico de Bola, es subida. Se salva bastante desnivel en muy poco tiempo, por eso recomiendo, si no se va algo preparado físicamente, hacer dos o tres paradas para dejar descansar los músculos de las piernas. Si por el contrario, tienes buena forma física, lo podrás hacer de un tirón en una hora aproximadamante.

En esta época del año flores de vívidos colores cubren partes de la montaña, además de notarse que no ha pasado ningún ser humano en casi dos meses, ya que en ciertas zonas del sendero, la vegetación ha demandado su espacio.

Al llevar aproximadamente un kilómetro de recorrido, llegamos a una curva de 90º en el sendero, pero decido salirme para contemplar las maravillosas vistas de los pueblos de la Sierra de Madrid. Se puede ver Navacerrada o Manzanares el Real y sus respectivos embalses.

Volvemos al sendero y nos quedan por recorrer unos cientos de metros entre piedras de diferentes tamaños y de mayor grado de inclinación. Es en este tramo donde recomiendo hacer alguna parada; al ir caminando entre piedras, los músculos se cargan más.

Una vez terminamos esta parte del recorrido, llegamos a un camino asfaltado que nos lleva hasta la cima. Me gusta pararme de vez en cuando para observar el paisaje y sacar alguna fotografía. Justo antes de llegar a Bola, si nos damos la vuelta podremos ver la estación de telesilla, y la zona de Siete Picos, otra ruta que próximamente también subiré.

Desde este punto ya solo nos quedan unos cuantos metros para llegar a la cima y ya vemos la edificación que hay en Bola del Mundo, también llamado Alto de las Guarramillas.

Mucha gente se pregunta de dónde viene el nombre de Bola del Mundo. En 1959, se construyeron estas antenas repetidoras de radio y televisión. En aquel momento solo existía un canal en España. (TVE 1). La emisión comenzaba con una imagen del globo terráqueo y unas antenas con forma de cohete, de ahí su nombre, Bola del Mundo.

Rodeamos las antenas y llegamos al vértice geodésico; para el que no lo sepa, es la construcción de hormigón cilíndrica que hay en todas las cimas de montañas.

Tras un pequeño piscolabis en la cima (yo suelo llevar barritas energéticas), bajamos por el mismo camino por el que hemos subido. Nada más comenzar la bajada vemos la caseta de los telesillas y una cafetería. Es raro encontrarla abierta, dado que, como consecuencia del cambio climático, cada vez nieva menos en Madrid, este año apenas hemos tenido unos días de nieve.

Rodeamos la cafetería y nos encontramos a la Virgen de las Nieves, imagen que también está en muchas montañas para cuidar a los montañeros.

Al finalizar el recorrido, estiro bien los músculos de las piernas y me paro en la fuente de los geólogos, que se encuentra en el arcén derecho, a unos pocos kilómetros bajando el Puerto de Navacerrada. Siempre lleno una botella, es una agua limpia y fresca.

Por último y como siempre, os dejo los enlaces para que podáis ver o comprar el equipo y la vestimenta que he llevado en este trekking prácticamente estival, por las altas temperaturas. Zapatillas de trail running Saucony Xodus, muy cómodas y transpirables, pantalón Columbia elástico y transpirable, Camiseta técnica Ternua Tipas, gorra Black Diamond para protegerme del sol, Gafas Cebe Jorases con protección máxima, y mochila Lowe Alpide Edge II.

Si quieres también puedes ver esta ruta de trekking en mi canal de Youtube.